Tuesday, August 07, 2007

El cuento de los Seres by Nada

* Se recuerda leer la introducción al cuento de los seres (está más abajo) antes de leer el cuento...

I
Georgitito estaba rezando, pidiéndole a sus dioses que esta noche fuera más divertida en su probeta, que los compuestos que le agregaran fueran más extremos y provocaran reacciones más potentes. Georgitito era un niño bueno. Tenía mucha fé, y todos los días le rezaba y hacía mandas a los dioses. Como recompensa a su fidelidad, éstos le mantenían vivo, lleno de alegría, viviendo con todo lo que necesitaba. Todo lo tenía.
Pero después de 314 mil 159 años Georgitito empezó a cambiar. Empezó a pensar,
algo mortal y peligroso para los dioses.
Cuando Georgitito fue desarrollándose, dejó de ser Georgitito, era George. Fue volviéndose fuerte y cada vez rezaba menos. Los dioses no se preocuparon y no querían hacer nada con su creación, era la única obra maestra que tenían.
Hubo un día en que George ya no necesitaba de agentes externos para mantener la homeostasis en su probeta. Él sintetizaba sus propios compuestos y satisfacía sus necesidades. George ya no rezaba, sabía que habían unos dioses, pero no eran fundamentales para su vida.
Poco a poco George dejó de creer en la necesidad de los dioses. Lo tenía todo. Con el tiempo desarrolló la capacidad de crear y destruir. Su inteligencia y poder eran superiores, hasta que un día gritó hacia fuera de la probeta: "Ya no los necesito!!" y George decidió desafiar a los dioses. El hecho de dejar de creer en ellos los debilitaba y los ponía en desventaja, puesto que los dioses se alimentan de la religiosidad y fé de sus "creaciones".Todo estaba listo.
Los dioses ya no existían...


* * * * * *

II
George quedaba solo en esa fría y obscura sala de experimentos que no parecía tener límites espaciales. Tenía de todo para hacer de todo. Siempre le gustaba pensar, desarrollar su adquirida capacidad de pensar y adrentarse en los sinfines filosóficos más profundos de lo creado y lo no creado.
Después de quinientos cuarenta y nueve mil seiscientos cincuenta y ocho años de "ocio" en pruebas, experimentos y pensar, George aprovechó su capacidad de crear y destruir para inventar una obra maestra, algo casi perfecto (casi, porque él se encontraba perfecto, entonces dejaba el "casi" para su creación), que tuviera vida por sí solo pero que aún dependiera de él. Luego de meditar mucho sobre esto, se decidió. Y así hizo nacer una criatura a su semejanza, la puso en un medio apto, acompañado con creaciones de experimentos anteriores. Todo esto para su entretención. Así nacería lo que luego sería el Homo. George miraba cómo vivía este ser, pero se dio cuenta que no había mayor diferencia con los demás, así que le dio la posibilidad de desarrollar conciencia. Se había formado el Hombre.
El hombre vivió por muchos años teniendo conciencia sobre George, a quien lo nombrarían de diversas formas y lo respetarían como "Dios". Los hombres orarían, levantarían plegarias, inventarían rezos, distintos credos y doctrinas para adorar a Dios. George estaba contento por eso, aunque siempre existían unos pocos "hombres malos", pero sabía que estaba dentro de la imperfección.
Años después George sintió que posiblemente había sido un error darle a los hombres la capacidad de pensar, puesto que cada día eran menos los que se dedicaban a adorarle y más los que se dedicaban a desarrollar sus ideas. Poco a poco, Gehová o George, fue siendo dejado de lado. Tres mil trescientos setenta y siete años después, el conocimiento y el pensamiento (no así su afecto) se había potenciado demasiado. George estaba en peligro, ya que, aparte de las sectas, nadie más creía en él o que el era necesario. El hombre hacía y deshacía a su gusto, por códigos y reglas inventadas por él. Sólo él era el límite de él. Así, George comenzó una guerra en contra de los hombres, empezaría lo que algunos habían predicado como "el apocalipsis", pero en verdad era un guerra, en la cual los hombres sabían qué era lo que tenían que hacer. Era ser destruidos o destruir a Dios.
Luego de la superioridad del hombre gracias a su AMBICIÓN (en verdad había sido un error hacerlos imperfectos!), George fue derrotado y vagaba desvalido por el espacio mientras el hombre lo conquistaba y desde cada estrella le gritaba: "Ya no te necesito!!". Al poco tiempo, George, con las pocas fuerzas que le quedaban, inventó la posibilidad de que muriera. Más tarde, murió.


* * * * * *

III
El hombre quedaba solo en el universo como dominante de todas las especies (las que quedaban). Las sectas adoradoras de un dios o de cualquier otra religión fueron eliminadas. Era una nueva era. Se conquistaba el espacio, se creaba lo necesario y se destruía lo que no servía. El hombre buscaba la felicidad (algo que nunca conseguiría) mediante la mejora de su calidad de vida. Todos los otros animales y seres vivos fueron restringidos, aún existían algunos, como mera compañía, pero más allá de eso nada. No costaba mucho equilibrar la naturaleza, puesto que ésta se había transformado nada más que en un simple sistema con variables predecibles, calculables y reemplazables.
La tecnología digital se venía utilizando y estudiando de hace muchos años, pero luego de la derrota de dios ésta se perfeccionó mucho más y se enfocó no sólo en la creación de "vida" inferior o "similar" al hombre, sino que máquinas que cada vez bordeaban más cerca de la perfección. Y todo esto por la ambición del hombre. Él era el controlador de todo, las máquinas (que en verdad ya eran más bien híbridos entre máquina y ser vivo) rendían y producían muy bien.
Pronto llegó un período en que las "máquinas" dejarían de llamarse máquinas, porque, mejor dicho, eran seres vivos hechos de materia orgánica, con estructuras interiores potenciadas (desde mejores y más resistentes esqueletos, órganos especiales, y otros atributos), pero con apariencia física idéntica a la del ser humano (que no había evolucionado mucho, aparte de unos cuántos dedos menos en los pies, uno más en cada mano y otras cosas). Lo que podría marcar una gran diferencia era la mentalidad de estos "humanoides" puesto que era perfecta... Había alcanzado la mezcla maestra, basado en la matemática (con esa base) en conjunto con la filosofía y, en ésta, incuídas todas las demás ciencias. La perfección se había logrado...
para desgracia del hombre, que había quedado como el ser inferior.
Apenas los perfectos seres se dieron cuenta de todo, de que sabían pensar e incluso interpretar sentimientos (NO SENTIRLOS... interpretarlos) se inició algo que se podría llamar "la revolución de las máquinas", pero sin ser máquinas exactamente. Esta revolución no duró demasiado, se inició con el estallido de la Guerra de los 16 minutos y luego de 4 minutos finalizaría con el exterminio final que duró 6 minutos. El hombre había desaparecido de la faz de la tierra.
El método utilizado por los seres perfectos para aniquilar a todo hombre no fue dificil. UNA PREGUNTA, sólo una pregunta del estilo A=-A ‡
-A , se reconocía al ser como humano y se eliminaba.
Todo había quedado dominado luego de 77 segundos por la perfección.
El caos había sido dominado, al fin.
El universo había sido domesticado.
Todo había adquirido un orden más complejo que la matemática complicada y una armonía inquebrantable (que bueno no ser parte del todo!).
Les contaré que pasó algo que no había pasado antes. No sé por qué este orden perfecto se rompe, quizás un factor más ínfimo que un electrón, pero que dentro del orden del todo universal produce una reacción desintegradora en cadena.
Todo el universo se condensa a una rapidez infinita en una partícula y luego esta simplemente eclosiona, explota y desaparece... todo desaparece
TODO!!


Y aquí quedo yo, la nada nunca desaparece, obviamente, porque no está aparecida, así que no puede des-aparecer ( y akí el mismo jueguito de palabras y restricciones del lenguaje =/). En terminos "simples" la nada simplemente "no está", "no es".